Un pescador sobre una barca en el puerto de Semporna. Borneo. Una patrullera color caqui también desentona entre los botes, todos de color blanco. espués de la segunda inmersión, en la que ya has perdido la cuenta de las especies que has visto, el bote se dirige a Mabul, donde se hace la tercera. Esta inmersión casi siempre es peor que en Sipadan porque la presión sobre el ecosistema de toda la gente alojada es muy fuerte y la visibilidad es siempre menor.  La recomiendo para los fanáticos del buceo que son capaces de hacer 5 ó 6 inmersiones al día, porque en la plataforma tienes todas las ventajas de estar en un barco de buceo pero ninguno de sus inconvenientes, aunque cuando el viento es fuerte, se bambolea un poco, pero nunca como un barco.  Con 5 plantas que pueden alojar casi a 100 personas, para bucear sólo tienes que ponerte el traje y te bajan en un elevador. Algunos buceadores intrépidos incluso se tiran desde la plataforma directamente al mar. En la propia base de la plataforma, colocada sobre 6 enormes pilotes que se apoyan sobre el fondo a 15 metros de profundidad, la variedad de fauna es enorme, incluido un pez que no conocía, y que parece "imposible", el pez sapo, que camina con manos en vez de aletas y tiene un aspecto rarísimo.  La plataforma está cerca de Mabul y el resto de inmersiones se hacen entre Mabul, Sipadan y Kapalai. Kapalai es una isla invisible 2 veces al día, porque en realidad es un banco de arena que desaparece con la marea alta, y de ella sólo asoman las cabañas construídas sobre pilotes.